El mercado parece haber encontrado el piso hace 15 días alrededor de los 100 centavos (posición mayo, ahora que marzo ya está desapareciendo) y el precio de café en la bolsa de Nueva York comenzó a subir de nuevo.

Después de un breve rally, que elevó el precio hasta 113.80 martes 18 de febrero, al pasar por el first notice day jueves, el precio retrocedió fuertemente con el roleo de contratos de marzo a mayo.

Pareció un aguafiestas y la bolsa cerró en 104.95. La fortaleza del dólar y las preocupaciones por el impacto del corona virus en la economía china y a nivel mundial contribuyeron a un sentimiento negativo. Sin embargo, viernes el sentimiento volteó, el precio recuperó hasta 111.20 y cerró en 110.25, un aumento de 5.30 centavos. De paso evitó que se revirtiera la señal de compra que se generó el martes.

Viendo para atrás, la formación del gráfico diario parece una especie de bandera, que indicaría un mayor aumento del precio en la semana que viene, pero hay muchas resistencias en el camino a los 120, se tiene que superar los promedios móviles de 100 y 200 días y la preocupación por la situación en China y la economía mundial se mantiene. Al otro lado, comenzó el carnaval y los brasileños van a estar de fiesta, quietos con sus ofertas de café y sus fijaciones de contratos, lo que abre el camino para un aumento del precio.

Soportes: 105, 102, 98 y 87.6. Resistencias: 112.9, 113.8, 115.9, 119, 122.9 y 127.5.

Los fondos aumentaron su apuesta a la baja, abriendo su posición corta neta de 14,632 a 16,523 contratos. Otra noticia negativa es que el real cedió ante el dólar hasta 4.4051, cerrando el viernes en 4.390. Noticias positivas fueron que los stocks de café verde en Estados Unidos bajaron 165 mil sacos a 6.7 millones, que las exportaciones de café en Brasil bajaron 7.2% comparado con enero 2019 a 3.2 millones de sacos, según datos de Cecafé, y el mal tiempo en Brasil que puede afectar el potencial de producción de café en Brasil.

Los stocks de café en Estados Unidos han bajado casi 700 mil sacos desde octubre, cuando alcanzaron casi 7.4 millones, según la GCA, pero todavía están 700 mil sacos arriba de enero 2019. Los inventarios certificados de Nueva York subieron 144 mil sacios a 2.18 millones en enero, pero los de Londres cayeron 100 mil a 2.4 millones.

Después de inundaciones en Espíritu Santo, principal estado productor de robusta, de nuevo fuertes lluvias en Minas Gerais, principal estado productor de café árabe y que produce más de la mitad de todo el café en Brasil. El Cerrado, que representa el 10% de la producción nacional, también fue afectado por el mal tiempo. Eso bajó las expectativas de un nuevo récord en Brasil con más de 65 millones de sacos y prestó soporte para el precio en la bolsa de Nueva York. El promedio de los pronósticos está ahora en 63.8 millones de sacos.

Los productores y exportadores de Vietnam vendieron de manera agresiva café en el rally de noviembre-diciembre, pero desde entonces están reteniendo café. Las exportaciones en enero alcanzaron 2.4 millones de sacos, 23% menos que en diciembre y 21% debajo de enero 2019. El acumulado de octubre a enero es 32% menos que el año pasado. El precio en el mercado nacional se ha elevado y eso influirá en el precio del robusta en la bolsa de Londres y en el precio de Nueva York.

Antes de iniciar el año nuevo TET, ya se había vendido 40% de la cosecha. El tamaño del grano es pequeño, lo que podría indicar que no se va a lograr una cosecha récord, 32.2 millones de sacos según el pronóstico de USDA. Las lluvias hacen temer que se está produciendo una sequía.

Colombia produjo 1 millón 50 mil sacos en enero, 19% menos que en enero 2019. El acumulado de octubre a enero es 5.6 millones de sacos, 640 mil o 13% más que el año pasado.

En Colombia por fin se ha lanzado el fondo de estabilización del precio de café, de que se ha hablado tanto, con una inyección de 218 mil millones de pesos (64 millones de dólares), por lo pronto poco para cambiar las perspectivas a los productores.

Los exportadores de Indonesia están quietos para vender embarques abril y mayo. El balance en el mercado interno está tenso y se espera que los tostadores van a aumentar sus compras en los próximos meses.

Las exportaciones de cafés suaves de América Latina de octubre a diciembre suman 6.9 millones de sacos, 400 mil menos que el año pasado. El alza del precio en noviembre-diciembre no ha desatado una ola de ventas como se hubiera esperado normalmente. La región sufre de los bajos precios, falta de financiamiento, de fertilizantes y de mano de obra y Centroamérica ha sido afectada por una sequía.

En el mercado físico, el sentimiento sigue alcista, con ofertas muy limitadas y diferenciales firmes. El énfasis está en las mejores calidades. Eso va a hacer menos atractivo ofertar café para las bolsas de Nueva York y Londres y va a bajar los inventarios certificados.

La región nororiental de África está siendo azotada por una plaga de langostas. Aparte de amenazar con generar una hambruna por la pérdida de la producción de alimentos, se teme que afectará la producción de café. La región produce 12-13 millones de sacos y los principales países productores son Etiopía y Uganda.

Japón importó 8.3 millones de sacos en 2019, contra 7.7 millones en 2018 y un promedio de 7.9 millones en los últimos 10 años. Japón es el principal importador y consumidor de café de Asia con un consumo per cápita de 3.8 kilos.